Estampas Fragatinas

Una sección de Ángel Cabrera
EL CALLEJON DEL GUANO





No, no está en una ciudad tercermundista (¿o sí?), ni esta situado en un extremo de la población, donde no llega luz, como dice la canción. Este callejón está situado justo en el centro de Fraga. Para más señas, comunica el único gran aparcamiento de la zona –La Pista- con el Paseo del Segoñé, donde está el Ayuntamiento. Discurre pegado a las oficinas de la DGA y es, en definitiva, una de las calles de entrada al Casco Histórico más transitadas. Una excelente “promoción” del Casco, nada más acceder a el.

Si la palomas son tozudas cagando, más tozudo debería ser el Ayuntamiento para limpiar la calle. Es absolutamente IM PRE SEN TA BLE tenerla así, No importa cuanta faena cueste, ni los medios que se usen, que los hay, pero tener una calle así lo dice todo de quien se ocupa de ella. Si hay que poner defensas anti-palomas en los tejados se ponen, si hay que limpiar a diario, se limpia, lo que sea menos seguir así. Claro que conociendo a nuestros ediles igual se les ocurre tapiar el callejón por los dos lados y así, ojos que no ven mierda que te ocultan.

Desde el Casco Histórico se podrían proponer visitas guiadas al callejón del guano, con explicaciones de algún biólogo fáunico, sobre las propiedades corrosivas de la mierda de paloma, editar trípticos informativos del tipo “Ten cuidado con paloma que en ésta calle está cagona”, e incluso montar algún guano/party en sábado de madrugada (cuando a todo el mundo se la pela todo), así no habría que sufrir por ensuciar la calle, es imposible.

En fín, no te conformes con verlo en foto, date una vuelta en persona y vive la emoción de resbalar en mierda de paloma y deslomarte en…¡¡¡EL CALLEJON DEL GUANO!!!

LA PODA AL MUÑON



No es diciembre, que es abril. Y sin embargo, ahí están, desnudos y tiritando. Sus otros compañeros de hoja llevan días floreciendo magníficos y alegrando las calles con su verdor, ellos no. ¿Están enfermos?  ¿sufren alguna carencia? No, son víctimas inocentes de una tropelía: LA PODA AL MUÑON.
Cada año, son sometidos a una poda/tala brutal que los deja en simples palitroques. No se deja ni una sola rama secundaria, no hablemos ya de terciarias, solo las ramas madre, mondas y lirondas, descarnadas…
Como consecuencia, mientras todos sus compañeros están dando sombra por toda Fraga, ellos están así: pelados. En los dos próximos meses, se esforzarán de lo lindo, sacarán hojitas, reharán sus ramas secundarias y terciarias, acabarán por poblarse al fin y darán cobijo al triste paseo que los alberga. Allá por julio los veremos en su plenitud. No nos hagamos ilusiones, si nadie lo remedia, los disfrutaremos un par de meses y a las primeras de cambio los volverán a masacrar.
Es su sino, salvo que alguien, algún día, se de cuenta  de que no se puede hacer una burrada semejante, para no tener que recoger las hojas caídas en otoño.